AFP – Continúan los éxitos militares de las fuerzas ucranianas. Según fuentes del ejército ucraniano, estos ya han alcanzado la frontera rusa y reconquistado en un mes el equivalente a siete veces el tamaño de Kiev al ejército ruso. Los habitantes de Izium, una ciudad de la región de Járkov, confirman que las tropas rusas han huido.
Nadiya Nesolena, residente de Izium, declara: «El ejército ruso comenzó a escapar. Alrededor de la 01:30 de la madrugada comenzó el bombardeo y los rusos prendieron fuego a los lugares donde se encontraban. Estaban cubriendo sus huellas. Fue entonces cuando entendimos que se estaban yendo».
«Ayer por la mañana estaban los rusos, y esta mañana ya están los ucranianos. No basta con decir que estoy contento, no tengo palabras para explicar lo que siento», confiesa Yuriy Kurochka, otro residente del lugar.
No está clara la cantidad total de territorio reconquistado
Teniendo en cuenta los primeros datos aportados por las fuerzas ucranianas, estos han recuperado un total de 500 kilometros cuadrados en los últimos 15 días solo en la región de Jersón.
La cantidad total de territorio recuperado no está clara. Las autoridades afirmaron el domingo que sumando las zonas del este y del sur, los territorios reconquistados abarcan 3 000 kilómetros cuadrado. Pero este lunes, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo que en realidad son 6 000 kilómetros cuadrado.
Al otro lado de la línea del frente, el ejército ucraniano dijo el lunes que había «conseguido expulsar al enemigo de más de 20 localidades» en 24 horas, y añadió que «las tropas rusas están abandonando apresuradamente sus posiciones y huyendo».
Esto contrasta con las declaraciones de los soldados de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk en la ciudad de Limán, quienes sostienen que aún mantienen el control.
«El enemigo intenta abrirse paso, sí, pero nosotros seguimos aquí», asegura uno de los soldados. Otro explica: «Todo está bien, la región de Limán ni ha sido ni será entregada».
Bombardeos en zonas civiles
Incluso en medio de toda esta euforia, las bajas siguen aumentando. La oficina presidencial de Ucrania dice que al menos cuatro civiles han muerto y 11 más han resultado heridos en una serie de ataques rusos en nueve regiones del país.