Foment del Treball encara el futuro electoral en Cataluña con nuevas propuestas para cambiar el contexto fiscal catalán, que su presidente, Josep Sánchez Llibre, ha definido como un «infierno». La patronal ha celebrado este martes un evento para presentar el Libro Verde de la fiscalidad en Cataluña, un compendio de 80 propuestas que tienen como objetivo convertir a la región en «la locomotora de la economía española».
Este nuevo documento, elaborado por 48 expertos de la propia patronal, entidades y otros profesionales, llega apenas unas horas después de que Foment pidiera 2.000 millones adicionales para sanidad y la sequía en los Presupuestos actuales, que son los del año pasado tras no aprobarse las cuentas para este año, hecho que ha comportado el adelanto electoral.
De hecho, Sánchez Llibre ha confirmado que hará llegar este conjunto de medidas a los grupos políticos para que las tengan en cuenta de cara a preparar sus propuestas para la cita electoral del 12 de mayo. Además, ha confirmado sin titubeos que el objetivo es influir en la Generalitat.
Menos impuestos para empresas y familias
El presidente de la patronal ha iniciado el acto advirtiendo que la reforma de la financiación autonómica que pretende el Govern no puede servir de «excusa» para no cambiar también la fiscalidad de la región, ya que opina que el modelo fiscal, que incluye hasta 11 gravámenes propios, además de los impuestos nacionales, supone una «barrera» a la inversión. Cataluña es la región de España con un mayor número de este tipo de impuestos.
Manel Silva, consejero a la presidencia de Foment del Treball, ha añadido que «la competitividad del sistema fiscal de Cataluña es extremadamente reducida». Además, ha lamentado que exista una desproporción notable entre las aportaciones de la ciudadanía y las prestaciones y servicios que reciben a cambio.
De hecho, según sus palabras, es la elevada carga impositiva entre impuestos propios y estatales los que suponen «una barrera importante» a la inversión empresarial, tanto local como internacional, en la región, así como para la llegada de nuevas empresas, generando una imagen de inseguridad jurídica. Además, también afectan al ahorro y la capacidad de las familias.