DW – Seis miembros de la exguerrilla de El Salvador fueron detenidos tras ser acusados del asesinato de una mujer durante la guerra civil (1980-1992), informó este miércoles (11.01.2023) el fiscal general, Rodolfo Delgado.
«En coordinación con la Policía, hemos logrado ejecutar la captura de 6 ‘excomandantes’ guerrilleros, acusados de participar directamente en el asesinato de María Inés (Alvarenga)», informó Delgado en Twitter.
Las detenciones se realizaron en la comunidad de Santa Marta, en el municipio de Victoria, y en el poblado de Guacotecti, ambas localidades en el departamento de Cabañas, unos 80 km al noreste de San Salvador. La Fiscalía identificó a los detenidos como Pedro Antonio Rivas, Teodoro Antonio Pacheco, Fidel Dolores Recinos, Alejandro Laínez, Miguel Ángel Gámez y Saúl Agustín Rivas.
El caso se remonta al 22 de agosto de 1989, cuando los miembros de la entonces guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) «irrumpieron» en la vivienda de Alvarenga en la comunidad de Santa Marta. «La acusaban (a María Inés) de colaborar con el Ejército, por lo que fue torturada y ejecutada», aseguró el fiscal.
En agosto de 1989, María Inés Alvarenga fue sacada de su casa, en el Cantón Santa Marta, Cabañas, por guerrilleros del FMLN.
La acusaban de colaborar con el ejército, por lo que fue torturada y ejecutada. pic.twitter.com/lMhph8pNhE
— Rodolfo Delgado (@FiscalGeneralSV) January 11, 2023
Debido a la represión militar durante la guerra civil a inicios de la década de 1980, la población de Santa Marta y comunidades vecinas huyeron a Honduras y, tras gestiones de Naciones Unidas, regresaron en 1987.
La Asociación de Desarrollo Económico Social (ADES) de la comunidad de Santa Marta denunció los arrestos mediante un comunicado: «Nos parece indignante y sospechoso que a casi 31 años del fin de la guerra civil salvadoreña y a más de 40 años de las atrocidades cometidas contra la población civil de Santa Marta (…) el Estado salvadoreño no fue capaz de judicializar un solo caso».
A inicios de la década de 1980, también en la zona de Santa Marta, se produjo la masacre de Copapayo en la que alrededor de 200 personas civiles murieron a manos del Ejército. Nunca fue investigada y permanece en la impunidad.
Con un saldo de 75.000 muertes y más de 7.000 personas desaparecidas, la guerra civil salvadoreña finalizó mediante la firma de acuerdos de paz entre el Gobierno y la guerrilla el 16 de enero de 1992.