Por: Dilen Montero
“Carece de nobleza quien no se atreve a alabar a un oponente.” (John Dryden)
El presidente Luis Abinader, se dirigió anoche a la nación, en otra de sus maratónicas y frecuentes alocuciones, sólo que esta vez, a propósito de cumplir sus dos primeros años de gestiones; un 16 de agosto que la constitución no establece rendir cuentas ni lanzar promesas, pero que tampoco lo prohibe.
El escenario fue nadamás y nada menos que la Hidalga Ciudad de los treinta Caballeros, Santiago, localidad ejemplo de gestión municipal, ornato y organización ciudadana, dirigida por el alcalde mejor valorado de la República Dominicana, y sin quizás, entre los mejores cinco de América Latina, hablo del también aspirante presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Abel Martínez.
El también miembro del Comité Político del PLD, agota desde hace poco más de un año, una amplia agenda de promoción de un mensaje de esperanza y renovación, con miras a convertirse en el próximo candidato presidencial del partido morado, jornada que lo ha llevado a posicionarse como el preferido por las bases y la dirigencia media y alta de esa organización, fundada por el prof. Juan Bosch.
El presidente Abinader en otro de sus intentos por recuperar un poco del capital político que ha perdido luego de tantos desatinos de su gestión, eligió la citada ciudad para hablar de temas, de inversiones, infraestructuras, gasto público, Ministerio Público «independiente», entre otros aspectos, momento en el que Santiago es valorada como la segunda ciudad mejor administrada municipal y administrativamente, según el sistema oficial que mide los gobiernos locales, SISMAP del Ministerio de Administración Pública (MAP).
Focalizó el oponente
El gobierno de «El Cambio», a pesar de sus desatinos gubernamentales, está lejos de ser tonto cuando se trata de la promoción de la figura presidencial – parte en la que consume una «importante» suma del presupuesto nacional, que usted y yo pagamos en los impuestos – ha decidido, no de manera fortuita, enfocarse en el alcalde anfitrión de su más reciente show, ejemplo de eso han sido las incontables veces que ni siquiera le invitan a eventos oficiales en su propia ciudad, los ataques directos y otros elementos, que se suman a la elección por parte sus asesores, de la ciudad corazón, como escenario del más reciente discurso.
Cuando parecía que las inclemencias del tiempo amenazaba la realización del evento gubernamental, el presidente insistió en mantener su discurso desde Santiago y procedieron a habilitar el escenario en el Gran Teatro del Cibao, centro de la ciudad, en una aviesa estrategia por construir capital político/electoral en la demarcación política del que ya enfocan como su oponente en las elecciones de agosto de 2024, Abel Martinez.
Hay un anunciado de establece que «en política y en la guerra todo se vale», sobre la base de esa mayor y la observación del pueblo podemos significar que la jugada del presidente y su equipo de asesores con elegir e insistir en Santiago, da una sólo lectura: Abel será el candidato a vencer en el 2024 y a ellos le horroriza, aún a dos años, la idea de ser los vencidos.
La suerte no esta echada, es trabajada a diario de punta a punta por Abel y un formidable equipo de hombres y mujeres del PLD y la sociedad en general, que ha logrado mover las estrategias del equipo de asesores del gobierno, el cual lejos de parecer desorientado en su afán por la reelección, está orientado a un oponente:
¡Abel es el hombre!
El autor es dirigente político, comunicador y experto en Comunicación Política y digital.