El crecimiento potencial de un país se define como la máxima expansión del nivel de producción alcanzable, dadas las tecnologías y los factores productivos a largo plazo. La tecnología tiene un efecto multiplicador en la función de producción al integrar recursos humanos, naturales y capital.
América Latina ha experimentado un avance significativo en conectividad a internet, cerrando la brecha con países de altos ingresos e incluso superando a China, según el informe Latin America Digital Transformation Report 2023 de la firma Atlántico.
En la última década, la penetración de internet en América Latina ha aumentado del 43% al 78%, superando el aumento en China del 42% al 74% entre 2012 y 2022. En países de altos ingresos, este porcentaje ha crecido del 75% al 90% en el mismo período.
El costo medio de 1GB de datos móviles en relación con el PIB per cápita es más alto en México, Venezuela y Costa Rica, seguidos por Argentina y Perú, según el informe. En contraste, es más bajo en Brasil, Chile, Colombia y Uruguay. Una conclusión importante es que el acceso a internet ha sido impulsado principalmente por la inclusión de las clases medias y bajas.
Según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), GSMA Intelligence y Eurostat, el número de usuarios de tecnologías conectadas alcanzó los 5.44 mil millones a principios de abril de 2024, lo que representa el 67.1% de la población mundial. Este total mundial de usuarios ha aumentado en 178 millones desde el año anterior, reflejando un crecimiento anual del 3.4%.
República Dominicana no ha sido ajena a estos cambios; en los últimos años ha buscado formas de lograr avances significativos en infraestructura digital y adopción generalizada de tecnologías de comunicación.
Un informe del Banco Mundial señala que el crecimiento sigue siendo insuficiente para reducir la pobreza y crear empleos. Se insta a combinar la conectividad digital con políticas complementarias para fomentar interacciones más activas e innovadoras en la sociedad. El informe proyecta tasas de crecimiento del PIB regional del 2.3% y 2.6% para 2024 y 2025 respectivamente, aunque no son suficientes para lograr avances necesarios en inclusión y reducción de la pobreza. En 2023 se estimó un crecimiento del 2.0%, ligeramente superior al 1.4% anteriormente reportado.