El 1 de junio el Banco Central dominicano (BC) anunció un plan de estímulos económicos con la colocación de RD$34,000 millones del encaje legal más RD$60,000 millones de facilidades de liquidez rápida (FLR) al sistema financiero, a los fines de que sean prestados a tasas no mayores de un 9% anual.
De esa forma, el BC busca dinamizar la economía, que en el primer cuatrimestre de este año muestra una desaceleración con apenas un 1.2% de crecimiento. Pero las entidades financieras, especialmente los bancos múltiples, parece que sorprendieron a las autoridades monetarias, pues en un tiempo récord de apenas dos semanas colocaron los RD$60,000 millones de FLR, sin que otros sectores tuvieran tiempo de beneficiarse de esos recursos.
Esta situación obligó al Banco Central a tomar medidas de control, a los fines de que los demás recursos de liquidez para préstamos a baja tasa no se destinen a sectores que, aparentemente, lo que hicieron fue beneficiarse de “sustitución de créditos caros por créditos baratos”, en lugar de tomar nuevos préstamos.
El pasado lunes 19 de junio, el Banco Central dispuso la liberación de otros RD$25,000 millones de FLR, además de los RD$34,000 millones de encaje legal que aún quedaban por desembolsar. Pero esta vez, el BC ha especificado que esos RD$59,000 serán desembolsados de forma “gradual”.
“El desembolso de estos recursos se realizará de forma gradual, en una proporción semanal que no exceda el 25% del monto correspondiente a cada entidad”, indica en un comunicado, con lo que deja entre ver que no fue de agrado la colocación en “tiempo récord” de los RD$60,000 millones.
El Banco Central también aclara que los recursos serán para la colocación de “prestamos nuevos”, a los sectores productivos; micro, pequeñas y medias empresas (mipymes), así como a los hogares (consumo) a tasas de interés que no superen el 9% anual.
Colocación rápida
La forma en que los bancos colocaron los primeros RD$60,000 millones sorprendió a muchos de sus clientes, quienes preguntaban cómo acceder a los créditos y les respondían que ya se habían agotado. Incluso, el economista Jaime Aristy Escuder, exigió de las autoridades monetarias que se detalle un informe sobre la forma y destino de esos préstamos.
Para tener una idea de que la colocación fue sorprendentemente rápida se pueden ofrecen algunos ejemplos. El 17 de enero de este año el Banco Central anunció que puso a disposición de las entidades financieras RD$21,424.4 millones del encaje legal para prestarlos a 9% a constructores y adquirientes de viviendas económicas, es decir, que no excedan un valor de RD$4.5 millones.
Tres meses y medio más tarde, el 2 de mayo de este año, el propio Banco Central informaba que los bancos apenas habían desembolsado RD$3,735.6 millones, es decir, apenas un 17.4% del monto total disponible.
Si bien es cierto que esos recursos son exclusivamente para créditos a viviendas, ¿cómo es posible que en poco más de 100 días solo se hayan canalizado RD$3,735 millones, y que en dos semanas sí se pudieron canalizar RD$60,000 millones para otros destinos?
Cartera de créditos
Otra muestra de la sorprendente capacidad de colocación es el propio comportamiento de la cartera de crédito de los bancos. De acuerdo con estadísticas de la Superintendencia de Bancos, durante el año 2019, previo a la pandemia, la cartera de crédito del sector financiero registró un crecimiento neto de RD$115,246 millones, es decir, menos del doble de los RD$60,000 millones colocados en dos semanas.
El pasado año 2022, los bancos vieron crecer su cartera de crédito en RD$210,793 millones, pero eso les tomó 12 meses de negociaciones con sus clientes para conceder esos préstamos. Incluso, en los primeros cuatro meses de este año (enero-abril) la cartera de préstamos neta del sector financiero ha crecido en RD$61,387 millones.
Lo anterior indica que los bancos tardaron cuatro meses para ver su cartera de créditos crecer en prácticamente la misma proporción en que pudieron colocar RD$60,000 millones durante apenas dos semanas.
Destino de los recursos
El Banco Central informó que entre el 2 y el 16 de junio los RD$60,000 millones de FLR fueron canalizados por los bancos de la siguiente forma: RD$30,000 millones “para otorgar nuevos financiamientos a sectores productivos y hogares, y a las mipymes”.
Adicionalmente, se desembolsaron RD$30,000 millones “para que dichas entidades pudieran contar con mayores niveles de liquidez, lo cual contribuiría a acelerar el mecanismo de transición de la política monetaria y la reducción de las tasas de interés, mediante la colocación gradual de nuevos préstamos para la actividad productiva, en la medida en que son agotados los procesos de evaluación de deudores”.
De los fondos destinados a los sectores productivos y hogares, el 62% fue canalizado por los bancos al sector comercio y a mipymes; seguido por el sector manufactura, con una participación de 16%. En tanto que hacia el sector construcción se destinó un 15%, y el 7% restante fue otorgado a los sectores agropecuario, hogares, salud, entre otros. Todos en un total de 1,194 préstamos a una tasa promedio ponderada de 8.7% anual, informó el BC.