La economía de España no solo sigue resistiendo, sino que además está acelerando en los primeros compases de 2023 (respecto al trimestre anterior). Aunque el buen momento que atraviesa el mercado laboral no ha sido suficiente para devolver a la vida al motor del consumo, en esta ocasión el dato de PIB se ha visto impulsado por la demanda externa (exportaciones y turismo, sobre todo) que vuelve a ‘tirar del carro’ de la economía. El PIB ha crecido un 0,5% intertrimestral, tres décimas más que en los últimos tres meses de 2022, mientras que en términos interanuales ha avanzado un 3,8% interanual. Los datos han rebasado las previsiones de los analistas, que habían vaticinado un crecimiento intertrimestral del 0,3% y uno anual del 3%. España es uno de los países que más crece de la zona euro.
Según los datos de contabilidad nacional avanzados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la demanda nacional (consumo e inversión) restó 0,8 puntos porcentuales al crecimiento trimestral, mientras que la demanda exterior (exportaciones menos importaciones) contribuyó positivamente con 1,3 puntos.
La histórica subida de los tipos de interés y el enrarecimiento del clima internacional (guerra, inflación, incertidumbre…), están pesando ya sobre el consumo. Los hogares están empezando a restringir sus decisiones de compra a través del crédito ante la subida de tipos y el incierto futuro (cada vez se habla más de una posible recesión en EEUU que arrastre a todas las economías desarrolladas).
Turismo y sector exterior
La otra cara de la moneda ha sido la demanda que viene de fuera (exportaciones y turismo). Este buen dato del sector exterior se ha producido por un fuerte incremento de las exportaciones, que se han disparado un 5,8% intertrimestral , frente al crecimiento del 3,1% de las importaciones. La fuerte expansión de las exportaciones (producto en gran parte de la masiva afluencia de turistas a España, cuyas compras contabilizan como exportación) han permitido que la demanda externa se expanda con gran velocidad en los tres primeros meses del año. El gasto de los turistas ha tocado un máximo histórico para los tres primeros meses del año.
El propio INE señala que «las exportaciones de bienes y servicios presentan una variación del 10,2% respecto al primer trimestre de 2022, lo que supone 3,1 puntos más que en el trimestre anterior. Esta aceleración se produce por un incremento en las tasas interanuales de las exportaciones de servicios (del 12,0% al 23,0%) y pese a la moderación de las exportaciones de bienes (del 5,8% al 4,9%). Además, el gasto de no residentes en el territorio económico sube 37,9 puntos«. En términos monetarios, esto supone un gasto de 11.700 millones de euros, una cifra muy elevada para los meses de enero, febrero y marzo (temporada baja para el turismo).
El Gobierno aplaude el dato
El Ministerio de Asuntos Económicos ha destacado que esta aceleración del PIB se ha debido al impulso de las exportaciones y a la inversión y se ha producido «en un contexto internacional de gran incertidumbre», marcado por las consecuencias de la guerra de Rusia en Ucrania, lo que evidencia, a su juicio, la «gran solidez y resiliencia» de la economía española.
Asimismo, el Departamento que dirige Nadia Calviño ha subrayado que España «ha alcanzado prácticamente el nivel de PIB previo a la pandemia», el único indicador pendiente de recuperar. España acelera, mientras que otros países como Francia echan el freno.
El avance de datos del INE está elaborado con la información disponible hasta febrero en la mayoría de los casos, aunque también ha incluido estimaciones de indicadores para el mes de marzo basadas en datos administrativos y otras fuentes adicionales.
El empleo aguanta
Los buenos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este jueves revelan que el mercado laboral sigue gozando de salud. En los primeros tres meses de 2023 se destruyó la menor cantidad de empleo en más de 15 años.
Ahora, con la llegada del buen tiempo y del turismo internacional se espera que el mercado laboral comience a generar más empleo cuando la tasa de paro ya se encuentra en niveles relativamente bajos (si se analiza la última década). No va a ser sencillo para los hosteleros y el sector del turismo encontrar toda la mano de obra que necesitan para la temporada alta.
El empleo de la economía, medido en horas trabajadas, aumentó el 0,4 % entre enero y marzo, mientras que los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo solo crecieron el 0,1 %, debido al menor incremento de las jornadas medias a tiempo completo.