(CNN) –– El Senado de Estados Unidos votó el jueves por la noche para aprobar un proyecto de ley provisional para evitar el cierre del gobierno a finales de esta semana, con los fondos programados actualmente para expirar el viernes a la medianoche.
La votación fue de 71 a 19.
Ahora que ha sido aprobada en el Senado, puede pasar al presidente Joe Biden para que se convierta en ley. La Cámara de Representantes aprobó la medida el miércoles.
La medida provisional extenderá el financiamiento por otra semana, hasta el viernes 23 de diciembre, para dar tiempo a los negociadores del Congreso para finalizar un acuerdo de financiamiento gubernamental más amplio para todo el año con nuevos niveles de gastos principales.
En una señal de progreso, los principales negociadores anunciaron el martes por la noche que se había llegado a un acuerdo para un marco que encamina a los legisladores para completar un amplio paquete de financiamiento gubernamental para todo el año.
El presidente de la Comisión de Asignaciones del Senado, Patrick Leahy, dijo en un comunicado que él y el miembro republicano de rango Richard Shelby y la presidenta de la Comisión de Asignaciones de la Cámara, Rosa DeLauro, habían “alcanzado un marco bipartidista y bicameral que debería permitirnos terminar un proyecto de ley de asignaciones generales que pueda aprobar la Cámara y el Senado y ser promulgada como ley por el presidente”.
Hasta ahora, sin embargo, los negociadores no han brindado muchos detalles sobre el acuerdo.
El miércoles, Shelby dijo que la línea superior es de aproximadamente US$ 1.700 billones, pero no dio más detalles. Shelby dijo que aún se están negociando las asignaciones exactas a las diferentes agencias gubernamentales.
El anuncio de que se había llegado a un acuerdo marco para un proyecto de ley de gastos más amplio representó un gran avance en las negociaciones, pero aún queda más trabajo por hacer ahora que los legisladores trabajan para finalizar la letra pequeña y los detalles de lo que la legislación en expansión incluirá.
La expectativa en el Capitolio es que el Congreso pueda evitar un cierre, pero los líderes del Congreso tienen poco margen de error dado el ajustado cronograma al que se enfrentan, por lo que los legisladores están bajo presión.
Un acuerdo bipartidista para un acuerdo de financiación del gobierno de todo el año ha demostrado ser difícil de asegurar en medio del desacuerdo entre las dos partes sobre cuánto dinero debe gastarse en prioridades nacionales no relacionadas con la defensa.
Los republicanos critican el reciente gasto interno de los demócratas y argumentan que las medidas que estos han aprobado mientras tenían el control de ambas cámaras del Congreso, como un proyecto de ley de alivio pandémico de US$ 1.900 billones y un proyecto de ley de atención médica y clima radical, son un desperdicio y empeorarán la inflación.
Los demócratas responden diciendo que esas medidas eran necesarias para ayudar al país a recuperarse del impacto devastador de la pandemia, así como para abordar otras prioridades críticas.
Los legisladores demócratas dicen que el dinero para responder al covid-19, la atención médica y el clima no debería significar que debería haber menos dinero el próximo año para operaciones gubernamentales y gastos domésticos que no sean de defensa.
