Esta semana El Salvador ha vivido un incremento de la violencia entre pandillas. Lo que ha provocado que el presidente Nayib Bukele ordene a la Policía y Fuerzas Armadas incursionar en distintos lugares del país para contener una escalada de homicidios.
“He ordenado incursiones de la Policía Nacional Civil y de la Fuerza Armada en los lugares donde se registraron homicidios ayer (martes) y hoy (miércoles)”, aseguró el mandatario en su página de Facebook.
Reportes de la prensa local indican que desde el pasado lunes se ha registrado un incremento en el número de homicidios. Solo el miércoles se contabilizaron 20 homicidios en el país. Hasta esta escalada de la violencia, la Policía contabilizaba de media tres al día, según EFE.
“En las próximas horas estaremos anunciando nuevas acciones para contener esta escalada de violencia y devolverles la tranquilidad a los salvadoreños”, remarcó el presidente Bukele.
En virtud del olan Control Territorial, aprobado por el gobierno de Bukele, el Ejército ayuda a la Policía en acciones de seguridad ciudadana, según AFP.
Las autoridades atribuyen a las pandillas la mayoría de los homicidios que ocurren en el país.
Las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, entre otras, tienen unos 70.000 miembros en El Salvador, más de 17.000 de ellos encarcelados, según las autoridades, y operan a través de homicidios, extorsiones, narcotráfico y otras actividades ilegales.
El Salvador cerró 2020 con 1.322 homicidios, un promedio de 20 muertes por cada 100.000 habitantes, menos de los 2.398 registrados en 2019 y la cifra más baja desde el fin de la guerra civil en 1992, según datos oficiales.
Además, entre el 1 de enero y el 2 de noviembre del año en curso se contabilizaron 936 asesinatos, 1.208 muertes menos que las 2.144 reportadas en el mismo periodo en 2019.