La mayor promotora inmobiliaria privada de China, Country Garden, ha advertido este martes del riesgo de entrar en ‘default’ por su incapacidad de pagar sus deudas internacionales.
En un informe bursátil, la compañía señala que no podrá hacer frente a todas sus futuras obligaciones de pago extraterritoriales, incluidos los bonos en dólares. El impago puede provocar que los acreedores exijan la aceleración del desembolso de la deuda o emprendan acciones ejecutivas, aclaró la empresa, indicando que ha sufrido un repentino deterioro de su salud financiera.
En lo que va de año, Country Garden ha resistido la crisis de liquidez del sector inmobiliario tras el impago en 2021 de otro gigante inmobiliario chino, Evergrande. La compañía ya incumplió el pago de sus bonos internacionales en agosto, lo que le dio un periodo de gracia de 30 días, dentro del cual evitó por poco el impago el mes pasado.
Country Garden estima que no podría efectuar los pagos «dentro de los períodos de gracia pertinentes», uno de los cuales expira la próxima semana.
El destino de la empresa, que era considerada como la más saneada en comparación con otros promotores privados y elegible para los programas de apoyo del Gobierno, supondrá presión sobre las autoridades chinas, que en 2020 trataron de reducir el apalancamiento de las promotoras inmobiliarias.
El posible impago de Country Garden también aumenta la incertidumbre sobre el sector inmobiliario chino, que representa más de una cuarta parte de la actividad económica del país, pero que lleva dos años con retrasos en la construcción tras una oleada de impagos de bonos por parte de promotoras.
